Siempre tenemos muy presente, sobre todo las chicas, el tema del peso: "el ideal", "el 90-60-90", "la operación bikini". Y así, llegar a convertirnos en el concepto de chica 10 que tienen los hombres.
Muchas chicas llegan más allá y se les va de las manos...Son chicas que, por culpa de los comentarios de la gente de su alrededor, sienten miedos, inseguridades y complejos.
Los problemas de peso más habituales y conocidos son la bulimia, por lo que se come mucho en poco tiempo y luego se vomita, la anorexia, por la que chicas con cuerpos delgados llegan a tal extremo de dejar de comer porque nunca se ven lo suficientemente bien, y la obesidad, en la que por el contrario, se come mucho, lo que genera un exceso de grasa corporal, o simplemente causado por el metabolismo, es decir, se está obeso cuando una persona acumula mucha grasa por diversas razones.
Se dan miles de casos de este tipo y además de en mujeres, lo más frecuente es que le ocurra a las adolescentes.
Personalmente, creo que muchas veces las opiniones de los demás nos pueden influenciar mucho, y pueden eliminar por completo hasta el mínimo de autoestima y seguridad que tengamos en nosotros mismos. Nos dejamos llevar por lo que piense el resto, llevándonos a pensar lo mismo nosotros.
Los comentarios dañinos de personas que nos importan suelen ser, en su mayoría, la causa de que algunas personas se refugien en la comida, o que, por el contrario, se repriman de ella, dejando de comer.
También existen casos en los que no es por las opiniones de los demás, sino por los problemas que rodean a la persona, lo que hace que ésta trastorne su alimentación por completo.
Por todo ello, me ha alegrado tanto entrar hoy en mi cuenta de twitter y ver tweets de ese tipo de chicas, a lo mejor no chicas con estos problemas, pero que aun no siendo "el ideal de chica 10 para los hombres", éstas sentían serlo.
Estas chicas han subido fotos de sus cuerpos escondidos, en parte, por unas cartulinas en las que había escritas frases como: "cambiemos el ideal de belleza", "es mi cuerpo, yo decido cómo es, no tú", "de mi cuerpo y mi vestuario, ahórrate el comentario".
Todos tenemos ese punto de superficialidad que nos hace, a veces, inclinarnos más por los "guapos", aunque en el fondo pensemos que nos conviene más una buena persona que un buen físico, que tarde o temprano desaparece.
Sigo pensando que todavía nos queda un largo camino para lograr que todos estos miedos, inseguridades y complejos de los que hablaba al principio, se vayan por completo de la mente de miles de chicas.
En conclusión, estoy muy satisfecha y orgullosa de que cosas como éstas sucedan, y que cada vez más personas se sumen a la mentalidad de pensar que lo que dice la báscula sólo son números.
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